fbpx

Cambios que me aterran y emocionan (estoy muy nerviosa)


Este es un episodio diferente, un detrás de cámaras en toda regla. Hoy te voy a contar las nuevas en mi vida, y en los cambios que va a haber de ahora en adelante por aquí.

Unos cambios que, créeme, no ha sido nada fácil para mí, pero que vistas las circunstancias y mi momento vital actual, es lo que necesito hacer.

Quizá te gusten. O quizá no tanto.

A mí sin duda esta decisión me saca tropecientos por mil de mi zona de confort, y requiere mucho más trabajo del normal por mi parte.

PERO al mismo tiempo me tiene emocionada y expectante por ver vuestra reacción. Y espero de corazón que os guste.

Ahora te cuento en qué consisten estos cambios vitales, pero antes necesito empezar por el principio para que lo entiendas.

Si llevas un tiempo por aquí sabrás que llevo unos meses viajando por Latinoamérica. Por ahora nos hemos recorrido Ecuador, de punta a punta, y ahora (en el momento en el que estoy grabando este episodio) estamos empezando a explorar Colombia.

En Ecuador hemos estado casi casi 3 meses, y lo gracioso es que fuimos con la idea de quedarnos un mes o así. Pero fue llegar y ver lo maravilloso que es este país, que fuimos alargando la estancia poco a poco.

Pero claro, a diferencia de la gran mayoría de viajeros que hemos conocido estos meses, Chris y yo somos emprendedores y tenemos negocios. Y aunque nos apasiona viajar, después de unas semanas más desconectados, tenemos esa necesidad de volver a conectar con nuestra pasión por el trabajo.

Viajar puede llegar a ser muy cansado, y cuando empezamos a sentir que nuestros niveles de energía van cayendo, elegimos una ciudad base para trabajar y recuperarnos.

Puede parecer curioso, porque a los 2 nos apasiona viajar, pero tengo claro después de estos primeros meses de viaje, que viajar nos va quitando la energía, y trabajar en nuestros negocios nos la devuelve.

Las últimas semanas en Ecuador fueron increíbles, pero realmente agotadoras. Para que te hagas una idea, fuimos 12 días a Galápagos, después una semana a la costa de Ecuador, después nos tocó un viaje de bus de 11 horas a Quito. Al día siguiente, otro viaje a primera hora de 3 horas o así para llegar a una ciudad de termas llamada Papallacta. Al día siguiente cogimos otro bus de 6 horas hasta una ciudad llamada Río Agrio, para al día siguiente coger otro bus a Cuyabeno, en mitad del Amazonas. Ahí estuvimos 5 días haciendo mogollón de actividades y disfrutando como niños. Y para terminar, otro bus de 11 horas de vuelta a Quito.

Vamos, que acabamos felices pero KAO. Y por eso fue llegar a Colombia, Medellín, y decir “necesito un descanso, y necesito reconectar con mi Yo Emprendedora”.

Además, en Medellín nos encontramos con la grata sorpresa de encontrar una ciudad llena de emprendedores, nómadas digitales y freelances.

Y, uno de mis mayores placeres estando aquí, es ir a una cafetería coworking llamada Semilla, tomar un rico desayuno, y trabajar rodeada de un ambiente muy inspirador.

Quería empezar por aquí para que, ahora cuando te cuente los cambies, entiendas la motivación de mi decisión.

Siguiendo con mi detrás de cámaras, lo primero que hice en Medellín fue terminar de organizar el lanzamiento que tuvimos la primera semana (y del que por cierto te hablaré dentro de poco para que puedas aprender de mis experiencias), y empezar a planificar los próximos meses de trabajo, intentando seguir mi método de 3 meses en 3 semanas.

Te leo mi lista de tareas:

  1. Escribir 6 Coffee Dates.
  2. Preparar 26 nuevas publicaciones para Instagram.
  3. Grabar 6 nuevas entrevistas y 7 nuevos solos para el podcast.

Estas eran como las tareas principales y lo que más tiempo me iba a llevar. Sobre todo el podcast, que es sin duda en lo que más tiempo invierto.

Y nada, feliz y motivada con el reto de preparar estos 3 meses de contenido en menos de 3 semanas, me puse a hacer mis deberes para seleccionar a las y los siguientes invitados del podcast.

¡Y PUM! SE ME APAGA EL ORDENADOR.

Uis… ¿qué ha pasado aquí? 

Sin darle demasiada importancia, porque ya me había pasado alguna que otra vez en el pasado, vuelvo a encenderlo. 

Y al rato ¡PUM! OTRA VEZ.

Ahí ya empecé a agobiarme. Porque, hace meses, cuando llevé el ordenador a arreglar, me dijeron que si se este problema volvía a aparecer, es porque hay un problema es la placa, y el arreglo es casi tan costoso como comprar otro ordenador.

Desde ese día, mi ordenador se ha ido apagando, de forma random, casi cada día. Y, gracias a que SOLO TRABAJO EN LA NUBE, mi trabajo no se pierde.

Pero sin duda es una faena que esto me ocurra en mitad del viaje.

Para escribir o hacer otras tareas no pasa nada, porque lo vuelvo a encender y sigo con mis cosas. Pero cuando se trata de hacer entrevistas, ahí la cosa se complica.

Eso unido a lo difícil que es encontrar un Airbnb con buen internet hace que mis ganas por hacer entrevistas para el podcast ahora mismo se hayan visto noqueadas.

Pero claro, lo que no voy a hacer es dejaros plantadas. Tú sabes el gran compromiso que siento con el podcast, y lo agradecida que estoy por que elijas darle al play e inviertas tu valiosísimo tiempo.

Asíiii que, después de darle millones de vueltas, me dije ¿y por qué no me lanzo a hacer 3 meses de episodios sola?

La idea de primeras me ATERRÓ,  no te voy a mentir.

¿Os interesará? ¿Perderé todas mis oyentes? ¿Tendré tanto que contar? Y el tiempo que me lleva prepararlos…

Así que, como cada vez que estoy bloqueada, saqué papel y boli y empecé a escribir temas de los que os podría hablar y que creo que te encantarán.

Una página, dos, tres, cuatro… Las ideas no paraban de llegar.

Y aunque el miedo del tiempo seguía ahí, me dije ¡VAMOS CON ELLO!

Así que, después de más de 4 años con el podcast, y más de 100 entrevistas con increíbles emprendedoras y emprendedores, vamos a darle un giro de tuerca al podcast.

Temporalmente. Hasta que vuelva a la vida normal y pueda retomar las entrevistas, con la buena conexión de mi hogar, mi súper micro, y un ordenador que no me deje tirada.

Como decía antes, quizá esta idea te encanta. O quizá te has quedado un poco chof. Pero porfa, solo te pido que me des una oportunidad. 

Lo único que quiero es ayudarte y acompañarte para crear un negocio increíble, y aunque lo fácil habría sido tomarme una pausa del podcast, o sacar uno al mes o así, mi compromiso es tan grande contigo y todas las oyentes, que me he sacado este as de la manga. 

Y de verdad, te aseguro que te voy a sorprender.

Mira, te cuento algunos de los temas de los que hablaré próximamente, para que te emociones conmigo:

  • Errores, viajes y libertad.
  • Email marketing: TODO lo que necesitas saber.
  • Cómo hacer tu propio reto y que sea un éxito.
  • Nuestra clave del éxito con el email marketing y cómo tú también puedes replicarlo.
  • Claves de crecimiento en Instagram.
  • Cómo planificar tus lanzamientos.
  • El detrás de cámaras de nuestro último lanzamiento.

Y estos son solo algunos de los temas de los que vamos a hablar. ¿Qué te parece?

¡Espero que estés emocionada con este giro inesperado, y que sigas acompañándome cada semana por aquí!

Y, para terminar con estos cambios, quería hablarte de otro tema.

Resulta que esta experiencia viajera me está enseñando una de las más valiosísimas lecciones de mi vida: A trabajar menos pero mejor.

Ya no estoy 5-6-7 horas al día, de lunes a viernes, delante del ordenador. Ahora trabajo el 20% de lo que hacía antes. Y esto me ha obligado a priorizar y pensar de forma más estratégica.

De esto te hablo más en profundidad en el episodio de la semana que viene, pero lo que ahora quería comentarte es que me he dado cuenta de la cantidad de tiempo que, entre comillas, perdía antes, por no priorizar.

Estos meses estoy aprendiendo que NO TODO ES IMPORTANTE, NI NECESARIO. Y que mi papel como CEO y visionaria de Yo Emprendedora es crear valor para vosotras, y encontrar formas de llegar a más y más emprendedoras.

Y los resultados hablan por sí solos. Entre enero y febrero del 2023 hemos aumentado la base de datos con 2.282 nuevas emprendedoras, en comparación con 405 entre enero y febrero.

También hemos preparado el mejor reto hasta ahora, al que se apuntaron de forma orgánica 996 emprendedoras.

Y te hablaría de los resultados del lanzamiento de marzo, pero estoy grabando este episodio justo en la semana del lanzamiento, y solo llevamos 2 días de campaña. Pero todo indica que va a ser un exitazo. Ya te hablaré más en profundidad de esto en el episodio de dentro de unas semanas.

¡Y NO SOLO ESO! También estoy creando unos planners increíbles que te van a ayudar muchísimo a crecer en tu proyecto o negocio.

Una idea que tengo desde hace mucho, y fíjate qué curioso, que cuando estaba en Valencia y trabajaba de lunes a viernes, nunca tenía tiempo para esto.

En resumen, se avecinan cambios y sorpresas. Y espero y deseo, de todo corazón, que te encante todo lo que saquemos en los próximos meses, y que te ayude una barbaridad.

Porque sé lo difícil y abrumador que puede llegar a ser esto de emprender, y mi único objetivo es AYUDARTE, ACOMPAÑARTE y HACERTE LA VIDA UN POCO MÁS FÁCIL.

Y, antes de despedirme, quiero daros las gracias a todas las que os pasáis por mis mensajes privados de instagram en @yoemprendedora.es y me decís lo mucho que os gusta y aporta el podcast.

Leer vuestros mensajes y ver el impacto que tiene en vuestras vidas es lo que me hace NO PAUSAR EL PODCAST durante estos meses de viaje y seguir ahí, al pie del cañón, para vosotras.

Os quiero chicas, gracias por todo.

¡Nos escuchamos la próxima semana!

Notas del Episodio:

 

Laura