Hay dos tipos de personas: las que esperan a los cambios, y las que crean el cambio. Y Mireia es sin duda del segundo grupo.
Tras terminar sus estudios universitarios y comenzar a trabajar en un banco, se dio cuenta de que su futuro no estaba entre esas cuatro paredes, sino creando valor y apostando por el progreso.
En su etapa en Inglaterra descubrió la economía colaborativa, y no tardó en darse cuenta del increíble potencial y la excelente oportunidad de mercado que tenía delante de sus narices.
En esa época, en España apenas se conocían otras formas de financiación alternativas como los business angels, el crowdfunding o el crowdlending, y aunque ser el primero en el mercado tiene sus ventajas, también “tienes que hacer una labor de divulgación para que las personas entiendan y conozcan tu proyecto.”
Mireia estaba decidida a romper barreras (¡vaya si lo ha hecho!), y en Junio de 2014 fundó Grow.ly, una plataforma de crowlending donde las pymes reciben financiación de múltiples inversores, y los inversores pueden invertir en varios proyectos, consiguiendo rentabilidad para sus ahorros y aportando su granito de arena al corazón de la economía y el progreso.
4 años más tarde, esta plataforma online ha conseguido prestar más de 14 millones de euros en 355 operaciones (y este número va aumentando cada día).
Pero llegar hasta aquí ha sido un camino largo, duro, y con múltiples retos y aprendizajes.
En esta entrevista, Mireia nos habla de sus motivaciones para emprender, los pasos que tuvo que dar para poner en marcha el proyecto, sus principales vías para darse a conocer, los mayores retos que ha tenido que superar, entre otras cosas.
¡No te pierdas la entrevista completa!
¿Qué te motivó e inspiró para emprender?
Conocí la economía colaborativa trabajando en Inglaterra, cuando todavía estaba en la universidad y me llamó la atención. Cuando terminé la carrera empecé a trabajar en un banco y quería hacer algo más.
Un producto como el crowdlending, donde personas prestaban directamente a pymes del país, tenía sentido para ambas partes; por un lado porque las empresas buscaban reducir su dependencia hacia la banca, y por otro porque los inversores buscaban productos con rentabilidad atractiva.
¿Qué pasos tuviste que dar al principio para poner tu proyecto en marcha?
Los principios siempre son complicados, especialmente en una start-up, puesto que suelen ser mercados totalmente nuevos donde tienes que empezar no solo tu negocio, sino que además tienes que hacer una labor de divulgación para que las personas entiendan y conozcan tu proyecto.
«Lo fundamental fue tener financiación puesto que un producto fintech requiere bastante inversión inicial.»
Aparte tuvimos que encontrar un socio tecnológico para el desarrollo de la plataforma y empezar a dar a conocer el producto, ver si tenía interés…
¿Cuál ha sido la manera más efectiva para dar a conocer tu negocio y atraer nuevos clientes?
Para nosotros la fórmula que mejor nos ha servido ha sido el boca a boca, junto con los medios de comunicación que se han hecho eco de nosotros y los eventos a los que hemos podido acudir a hablar sobre nuestro modelo.
¿A qué retos te has enfrentado en tu trayectoria como emprendedora y cómo los has superado?
Los retos para un emprendedor son continuos. Yo siempre comparo esta travesía como una montaña rusa donde por la mañana a primera hora estás abajo porque ha ocurrido algo malo, después sales de una reunión donde acabas de cerrar un acuerdo clave y estás en las nubes y de repente vuelve a ocurrir algo que te desestabiliza el día.
«Aun así, quizás uno de los retos más importantes ha sido el de la aprobación de CNMV como Plataforma de Financiación Participativa.»
Fueron muchos meses (de hecho, fue más de un año) entre que se preparó el expediente, nos lo revisaron, pidieron aclaraciones, más aclaraciones y finalmente nos lo autorizaron.
Fue duro, tuvimos y todavía tenemos que dedicarle muchas horas de trabajo y papeleo, pero a su vez supuso un punto de inflexión para nosotros y fue un cambio clave.
¿Qué consejo le darías a otras mujeres emprendedoras?
«Que aprendan a tomarse también un tiempo para ellas fuera del trabajo.»
Es difícil cuando se trata de tu proyecto aprender a desconectar, pero es fundamental para nuestra saludo el saber que en ocasiones es necesario parar, delegar, confiar en otras personas… Para nuestro bien pero también para el de nuestro proyecto.
¿Tienes algún truco/hábito/rutina que te ayude a mantener un buen equilibrio entre tu vida profesional y personal?
Durante la semana trabajo muchísimas horas, y antes los fines de semana también. Pero ahora intento reducir las horas de trabajo al mínimo imprescindible el fin de semana para así desconectar: leo, salgo con amigos, cocino…
Esto muchas veces me ayuda a conseguir encontrar soluciones de repente a problemas de los que unos días antes no salía, y también facilita que el resto de la semana esté mucho más productiva. Para mi es fundamental.
Háblanos de algún hábito que te ayude a ser productiva y dar lo mejor de ti a diario
Tengo una agenda (un bullet journal realmente que me he diseñado yo según mis necesidades) donde apunto absolutamente todo y me ayuda mucho, porque emprender es una lista interminable de cosas por hacer y es imposible tenerlo todo en la cabeza.
Además de esta manera no estás todo el rato recordándote a ti misma “lo tengo que hacer, lo tengo que hacer…” simplemente lo apuntas para un día, lo haces cuando corresponde y lo tachas. Es muy liberador y a mí personalmente me hace muy eficiente.
Cuando me enfrento a un reto, yo…
«Suelo ponerlo en perspectiva y romperlo en pequeñas tareas para que no me sobrepase.»
Si me llega un requerimiento de nuestro supervisor con 50 puntos que tenemos que preparar, empiezo por el primero y voy haciendo y tachando según voy terminando. De esta manera los retos se hacen mucho más “accesibles”.
Si pudiera volver a los comienzos de mi negocio, me diría a mi misma…
Que escuchara a los demás pero que también confiara un poco más en mi criterio.
Una frase que me que inspira es…
Mi abuelo paterno dejó en su twitter escrita esta frase de Confucio. Por aquel entonces estaba peleando contra una enfermedad que le hacía sufrir mucho y que le quitó la vida y me pareció, como tantos actos suyos, algo sobre lo que aprender:
“El mayor error es sucumbir al abatimiento; todos los demás errores pueden repararse, este no.”
El mejor consejo que me han dado es…
Que simplemente siga adelante. Como emprendedores nuestro día a día está lleno de rechazos por parte de inversores, clientes, jueces de concursos… Lo normal es que te digan que no.
Hay que ser perseverante y no tirar la toalla (hay veces que un negocio simplemente no tiene sentido, lo cojas por donde lo cojas, lógicamente en esos casos hay que saber también simplemente dejarlo).
Mi recurso (canal de Youtube/ página web/ libro/ podcast/ app) favorito es…
Hay multitud de recursos gratuitos en internet muy útiles. Hice por ejemplo un curso gratuito de google para entender las bases de la programación que me ayudan a orientarme en ciertos temas que no domino. No he aprendido a programar pero me ha servido para tener unas nociones básicas muy útiles a la hora de gestionar la empresa.
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