Hoy vamos a hablar de…
- La importancia volver siempre al gallinero – no me he vuelto loca, lo prometo 😉
- El gen emprendedor.
- Las claves que deberías llevarte de las experiencias de Luis Ramos ¡y aplicar en tu negocio!
- ¡Y todo esto en menos de 5 minutos!
Hoy vamos a analizar en profundidad la trayectoria de Luis Ramos, emprendedor de varias empresas (siendo la más conocida Libros para Emprendedores).
La historia nos la conocemos. Todo empieza con un sueño lejano que poco a poco se va haciendo más y más real en tu cabeza, hasta que llega un día no puedes más y te lanzas a por ello.
Y en el caso de Luis, su sueño era dirigir una empresa de construcción, y tras muchos vaivenes mentales, dejó su trabajo en un banco internacional para emprender.
Resumiendo mucho la historia, Luis supo rodearse de gente con experiencia en el mundo de los negocios, y en el transcurso de unos pocos años había creado varios proyectos (tanto solo como acompañado por socios).
Algunos fueron mal y otros muy bien.
Desde siempre Luis ha estado en constante aprendizaje. Lee más de 70 libros por año. También asiste a cursos y talleres con los mejores expertos a nivel mundial. Pero todo este esfuerzo no tendría sentido si no lo pusiera EN PRÁCTICA.
Y no solo le sirve para su negocio, sino que también ayuda a sus clientes con todos estos conocimientos que aprende día a día.
Te cuento un poco sobre la infancia de Luis
Probablemente, si has visto alguna entrevista de Luis, ya conozcas la historia de su abuela – honra mucho su recuerdo.
Y si no es así, te cuento una anécdota muy graciosa a la par que inspiradora:
De pequeño, todos los veranos los pasaba con su abuela, en su casa de campo. Rodeado de animales y vegetación.
Se levantaban muy pronto para ayudar a su abuela y cuidar de todo lo que les rodeaba.
Un día, haciendo su rutina de recoger los huevos frescos que habían puesto las gallinas, su abuela de Luis le dijo:
“¡Mira! Acabo de encontrar un huevo mágico 🌟 Llévalo a la cocina. Lo cocinaremos y ya verás como salen dos yemas. ¡Nos darán súper poderes!”
Luis, emocionado por comerse esas dos yemas del huevo mágico, salió corriendo.
Con la mala pata de tropezarse – ¡y adiós al huevo mágico!
Imaginaros el disgusto que se llevó. Se había cargado el huevo y la posibilidad de tener súper poderes. Tanto para él como para su abuela. Se sentía más que fatal…
Mientras que lloraba desconsoladamente, su abuela, con amor, lo recogió del suelo y le dijo:
“No te preocupes cariño, siempre podemos volver a por más huevos al gallinero.”
Ese día, la abuela de Luis le dio tres grandes lecciones que se quedaron para siempre grabadas en el ADN de Luis:
- Si quieres huevos, hay que ir todos los días al gallinero y cuidar de tus gallinas.
- Cuando un huevo está fresco, es mejor cocinarlo al momento.
- Te puedes tropezar y no pasa nada. Pero después, debes regresar al gallinero, porque ahí siempre habrá más huevos.
Siempre puedes volver a por más huevos al gallinero
Ahora, te mando un ejercicio. Revisa las tres enseñanzas de la abuela de Luis y reformula las frases.
Cambia las siguientes palabras:
- huevos = ideas
- gallinero = mercado
- gallinas = clientes / comunidad
- cocinar =ejecutar
¿Entiendes por donde voy? 😊
Gen emprendedor
Al igual que ha hecho Luis a lo largo de su vida, debemos APLICAR Y EJECUTAR estas enseñanzas a nuestros emprendimientos.
Tal vez pienses que esto del emprendimiento es para ti. O tal vez no.
Déjame decirte que existe lo que Luis denomina el Gen emprendedor – nosotras podríamos acuñarlo con el término “Gen Yo Emprendedora”
Este gen te permite tener la capacidad y motivación de emprender. De crear nuevos negocios, nuevas formas de ayudar a los demás.
Hay muchos que creen que solo un 10% de la población tiene este gen emprendedor.
❌ FALSO
También piensan que solo el 10% de la población es capaz de tener su propio negocio.
❌ FALSO
Y que solo un 10% de la población es capaz de activar el gen emprendedor.
✅ Esto sí que es verdad. La buena noticia es que eso se traduce a que el 100% DE LA POBLACIÓN TENEMOS GEN EMPRENDEDOR.
“Vale, Laura. Has dicho que todos lo tenemos, pero solo el 10% lo activa.”
¿Pero dónde activo ese botón?
Primero, vuelve a subir y relee los aprendizajes de Luis con su abuela.
Segundo, aplica y ejecuta.
A veces es necesario cambiar nuestra mentalidad y desaprender muchas cosas para dejar espacio a nuevos conocimientos, nuevas habilidades y nuevas oportunidades.
No basta con ponerse la etiqueta de ‘Soy emprendedora’. Está bien que lo pienses, digas y sientas. Pero un gran poder conlleva una gran responsabilidad – como dijo el tío de Spiderman.
Pasa a la acción. Ten ideas diferentes y ponlas inmediatamente en práctica.
Para obtener resultados diferentes, debes actuar diferente
Como ya sabes, Luis tiene varias empresas simultáneamente.
La mayoría de ellas enfocadas a ayudar a mejorar a los emprendedores. Como Libros para emprendedores o Mentor 360.
Desde que empezó este recorrido, él y su equipo han leído infinidad de formularios que contestan sus alumnos – ¡Más de 12.000 en un solo año!
En los formularios, preguntan a sus alumnos (de todas partes del mundo) cuáles son las dificultades y problemas que se encuentran a lo largo del camino del emprendimiento. Y alucina.
Todo se resume en TRES PROBLEMAS que tienen en común TODOS LOS EMPRENDEDORES:
- Ideas:
Si tienes problemas a la hora de tener nuevas ideas, solo debes prestar atención al mundo que te rodea.
Así conseguirás dar en el clavo, creando una solución donde efectivamente existe un problema.
- Validación:
Es súper importante que valides las ideas que estás teniendo. Algunas valdrán, otras a lo mejor no tanto.
Así que, ¿por qué no buscas a un mentor experto en el tema y le preguntas si vas bien encaminado?
O más sencillo aún.
Cuéntale a tu ‘futuro posible cliente’ la idea que has tenido y pregúntales directamente si lo compraría.
- Acción:
¡No hay tiempo que perder!
Si tu proyecto acaba siendo un fracaso, mejor saberlo antes que después. Así no ‘pierdes tiempo’.
Y si es un éxito, ¡también saberlo cuanto antes! 🥳
Luis denomina esto como el IVA de los emprendedores.
Estás a solo 3 pasos de conseguir una mejor versión de ti misma y de tu emprendimiento.
¿Qué podemos aprender de Luis Ribas?
Primero, ejecuta siempre tus ideas de negocio y no te estanques en una sola.
Recuerda que si un huevo se te rompe, hay más en el gallinero.
Solo debes cuidar de tus gallinas y podrás cocinar todos los huevos que quieras.
Segundo, todas tenemos el Gen Yo Emprendedora, solo debemos activar los botones de:
- Cambio de mentalidad
- Cambio de habilidades
Aprende cosas nuevas todos los días, ponlas en práctica, descarta lo que no te sirve y fluye con lo que sí te está funcionando.
Tercero, usa el “IVA de los emprendedores” a tu favor. Ten muchas ideas, valídalas y toma acción para llevarlas a cabo. Así de simple. En 3 pasos.
Y por si todavía no tienes claro que todos tenemos el Gen Yo Emprendedora, te lanzo estas preguntas:
- En tu vida personal, ¿quieres generar más ingresos?
Las emprendedoras también. - En tu vida personal, ¿quieres recibir más beneficios?
Las emprendedoras también. - En tu vida personal, ¿quieres mayor calidad de vida para ti y los tuyos?
Las emprendedoras también.
¿Has visto que no hay diferencia?
A este fenómeno Luis lo llama “tener una YO S.A.”
Así que, cuida de tu YO S.A., ves al gallinero, rompe huevos o cómetelos. Haz y deshaz a tu antojo. Lo que tú quieras.
Pero, por favor, ¡ACTÚA! El mundo está esperando ver tu esplendor 🤩
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