Hoy vamos a hablar de…
- Cómo Isabel Llorens pasó de llevar un hotelito de 10 habitaciones, junto con su socia Carlota, a convertirse en una empresa exitosa que agrupa a más de 300 alojamientos por el mundo.
- Cómo hacer que tu negocio perdure a lo largo de 28 años – y más allá.
- Las claves que deberías llevarte de sus experiencias ¡y aplicar en tu negocio!
- ¡Y todo esto en menos de 5 minutos!
Hoy vengo a hablarte de RUSTICAE. Y de su increíble cofundadora, Isabel Llorens.
Isabel es veterana en Yo Emprendedora. Hace un tiempo tuve el placer de entrevistarla en nuestro podcast – te dejo el link por aquí para que puedas escucharlo 
Pero, como nos fascina que lleve con su negocio desde 1995 (¡y lo bien que lo está haciendo!), hoy vamos a ver el por qué de su gran éxito.
¡Ya verás, te va a encantar!
Rusticae, más que una empresa, es un club – como Yo Emprendedora 
– de hoteles rurales con encanto.
Abanderados por su lema “No demasiados, porque solo tenemos lo mejor”, en Rusticae encontramos una exquisita selección de unos 300 alojamientos repartidos por Europa, Norte de África y Latino América.
De esta manera, son capaces de marcar diferencia entre sus clientes y partners.
Con estos alojamientos organizan formaciones, crean propuestas de marketing, se recomiendan unos a otros, comparten logros…
Y con sus clientes tienen un trato súper cercano y personalizado – que como ya sabes, ¡esto sí que marca una gran diferencia!
Además, en sus más de 20 años con Rusticae, Isabel ha podido comprobar que la empatía innata de las mujeres les hace ser grandes profesionales (a pesar de lo que otros puedan pensar…
)
Y por eso, el 90% de su equipo está formado por mujeres.
¡AMÉN!
Hablemos de Isabel y Carlota
Isabel vivía y trabajaba en Inglaterra, y a pesar de la gran oportunidad profesional que le estaba brindando este país, se moría de ganas por volver. (España tira mucho 😍)
Y ya sabes lo que dicen “cuando deseas algo con fuerza, el universo confabula para dártelo…”
Isabel tenía una amiga en Inglaterra, Carlota.
Las dos eran españolas, asturianas y unas enamoradas de su tierra.
Soñaban con hacer algo juntas… Y esa oportunidad se la regalaron los padres de Carlota, cediéndoles un hotelito que tenían en Asturias para que lo gestionaran juntas.
Hasta ese momento, el hotelito solo se abría los dos meses fuertes de verano, porque el resto del año tenían otros trabajos y obligaciones.
Así que con gusto, estas dos amigas cogieron las riendas del negocio.
Pero…
No tenían suficientes ganancias como para dedicarse exclusivamente a ello.
Y para poder tirar, Isabel compaginaba su negocio, el hotelito, con un trabajo a tiempo parcial en una cafetería.
Les resultaba muy difícil vender esta experiencia, ya que el turismo rural no era demasiado popular.
Sin mencionar que, el que fueran mujeres JÓVENES tampoco les ayudaba demasiado.
Imagínate, en 1996, la “autoridad” que podía dar dos muchachas al frente de un ‘hotelito’.
¡Reto a la vista!
Llegó un punto en que la situación se volvió insostenible.
Así que decidieron tomar cartas en el asunto y empezar a ‘darle al coco’ para transformar su situación.
Ya sabes cómo es esto… Brain storming de ideas. Millones de opciones. Un día todas te parecen increíbles. Al día siguiente ninguna…
Hasta que, de repente, un día se te enciende la bombillita.
¡Y pum! Ahí la tienes. Delante de ti. Tu próximo proyecto emprendedor.
Muchas veces, esta idea llega de una necesidad, un deseo (¡o la combinación de ambas!), y para Isabel y Carlota, definitivamente fue la tercera opción.
“¿Y si creamos una plataforma para apoyar y dar visibilidad a alojamientos rurales en España?”
¡Bingo! Así surgió RUSTICAE.
Pero los comienzos nunca son fáciles…
Isabel y Carlota empezaron a presentar su propuesta a muchas y variadas empresas del sector.
Punto a favor: A la gente le gustaba la idea.
Punto en contra: TODAVÍA no confiaban en que pudiera funcionar, por el simple hecho que TODAVÍA no tenían afiliados a su nueva idea de negocio.
Algunos incluso les decían que estaban locas (¡Viva las locas!🙌)
“¿Cómo os vais a meter en el sector turístico, compitiendo con las grandes empresas?”
“Esto es una guerra perdida”
“Solo sois un pequeño hotel de 10 habitaciones”.
Pero ellas continuaron pico y pala con su idea de negocio Rusticae.
¡Hasta que caló!
¿Y qué vino después?
En aquella época era normal poner anuncios en periódicos, visitar a directores de empresa en sus despachos, cultivar el ‘boca – oreja’… Todo para captar nuevos clientes.
Y así lo hicieron. No negaban que tenían una competencia muy grande en el sector turístico. Así que optaron por no competir.
Es decir, mostraron la belleza del negocio desde otras perspectivas.
Si las grandes cadenas hoteleras hacían un anuncio en la tele, ellas lo hacían en el periódico.
Si las grandes hoteleras te bombardeaban con anuncios masivos, ellas hacían bonitos videos motivadores e inspiradores, para tocar la fibra sensible del público.
Y así, poco a poco, siendo fieles a su identidad y mostrando qué era eso tan especial que tenían para ofrecer al mundo, llegaron a lo que son hoy en día.
Pero, ¿tan “sencillo” fue?
No, sencillo no.
La clave de Rusticae ha sido (y es) pararse cada año a observar qué han conseguido y qué quieren conseguir.
¿Está bien? Continuamos.
¿No está bien? Analizamos y pivotamos.
¿El mercado cambia? Nosotras cambiamos con él.
Porque sí, amiga mía, es indispensable ADAPTARSE al entorno, si no quieres morir anclada en el pasado.
Imagínate lo complicado que fue para Isabel y Carlota cambiar de lo analógico a lo digital. De tener que ir a “cuatro periódicos y dos despachos”, a ir a… ¿Por dónde empiezo?
Internet nos brinda unas posibilidades de expansión y visibilidad brutales.
Pero también, con ese mercado entero a tu disposición, el abanico de posibles siguientes acciones ¡se multiplica por millones!
Y eso puede ser de lo más contraproducente y hacerte caer en la parálisis por análisis.
Si alguna vez te sientes así, perdida entre opciones y sin saber por dónde seguir, te invito a recordar esta historia de Rusticae, y de cómo ellas consiguieron adaptarse a este cambio tan heavy 🤩
Nunca se han quedado quietas – recuerda, desde 1995:
- Siguen trabajando con la prensa.
- Tienen la web siempre actualizada.
- Se fijan mucho en las estrategias de SEO y SEM.
- Han creado una red de afiliados.
- Tienen newsletter, para contar historias que conecten con los lectores.
- Usan mucho las colaboraciones – pero siempre con influencers con los que conectan de verdad.
- Implementan diferentes estrategias para cada país.
- También han creado su propio podcast – (quizá influencia de nuestra entrevista en Yo Emprendedora 🤭).
- Miman mucho a su comunidad de hoteleras y crecen juntos.
Y lo más importante.
Están en continuo aprendizaje, recalculando todos los puntos de su negocio, para así poder prosperar y perdurar en el tiempo.
¿Qué podemos aprender de Rusticae?
Primero, a veces es bueno empezar en pequeño e ir escalando.
Isabel y Carlota estuvieron durante un año gestionando un hotelito de 10 habitaciones.
Esto les hizo adquirir el conocimiento base y darse cuenta de que, si seguían así, el negocio no iba a funcionar.
Entonces crearon Rusticae y todos los puntos se conectaron.
¿Pero crees que Rusticae se hubiera fundado, sin conocer los problemas de ese pequeño hotelito? Yo diría que no.
Segundo, no siempre es correcta la frase de ‘los comienzos son difíciles’.
Sí, lo son. Pero más adelante vas a tener nuevos retos que también serán difíciles.
Piensa lo que le costó al MUNDO pasar de lo analógico a lo digital (decían que los ordenadores explotarían en el año 2000 y cosas así…)
Y ahora imagínate esa situación aplicada a un negocio 
. ¡Reto absoluto!
Así que, si eres capaz de superar los primeros baches, ten por seguro que superarás lo que venga. ¡Solo debes querer hacerlo!
Tercero, debemos ser auténticas y fieles a nuestra esencia. Crear un negocio en base a lo que vibre con nosotras.
¡Y nunca compararnos! Mucho menos con las grandes corporaciones.
Recuerda que tu toque personal es lo que te diferencia, y por eso nunca deberías esconderlo.
Tal vez consigas pasar de un hotelito de 10 habitaciones, a un club de +300 alojamientos, solo por ser tú.
Conclusión
Es súper importante pasar por todas las fases de tu negocio, para aprender cómo funcionan las reglas del juego.
No des por hecho que ya sabes de qué va la cosa, porque el mundo está en constante cambio – mira lo qué está pasando con la inteligencia artificial ahora 
Así que muéstrate al mundo tal y como eres, no dejes de aprender nunca y mima a tu negocio como a ti misma.
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