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Conversación sin filtros: Lo que no me ha funcionado

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¡Qué ganas tenía de hacer este episodio!

Hoy te voy a contar 5 cosas que no me han funcionado durante estos 5 años que llevamos con Yo Emprendedora.

Algunas son estrategias, otras son más de mentalidad. Y creo que te va a gustar y te van a ayudar con tu negocio. Porque quizá estás viviendo alguna de estas cosas que te voy a comentar, o quizá en el futuro te veas en una situación similar, y simplemente acordarte que hay otras emprendedoras que también han pasado por ahí, y cómo lo han gestionado, es inspirador y puede ayudarnos mucho.

Pero antes, quiero comentarte algo gracioso.

Dicho esto, ¡vamos con este pedazo episodio!

  • Y lo primero de lo que te quiero hablar es de lanzamientos.

Nosotras en Y.E. hacemos 3-4 lanzamientos al año del Club. Pero no siempre ha sido así. Durante casi un año, de septiembre del 2021 a agosto del 2022, pasamos a un modelo de lanzamientos mensual.

Y lo hacíamos de la siguiente forma: El día uno de cada mes abríamos las puertas del Club durante 24 horas. Así, las chicas que querían unirse, no tenían que esperar por meses, sino máximo 30 días.

Y oye, los primeros meses no nos fue mal. Porque estábamos consiguiendo en un mes lo que antes hacíamos cada 3.

Pero, el problema entre comillas empezó a llegar a los 5 meses o así.

¿Por qué? Pues por varios motivos: Primero, no me daba tiempo a preparar estrategias de pre-lanzamiento, y pasamos de hacer retos, masterclasses etc. a no hacer nada más que el email marketing.

Segundo, porque como iba con las prisas mes a mes, tampoco estaba centrada en captación de leads, ni aumentar la comunidad. Y por esa razón, el lanzamiento se lo hacíamos a las mismas personas mes a mes.

Y como resultado, las altas al Club fueron bajando y bajando. Tanto, que en el último mes de lanzamientos mensuales, las bajas de la membresías eran mayores a las altas.

Ahí tuve un choque de realidad brutal, y me di cuenta que, o reaccionaba, o me cargaba el Club.

¿Significa esto que los lanzamientos mensuales son una mala estrategia? PARA NADA, pero siempre y cuando tengas la estructura y capacidad interna en tu negocio de seguir llegando a más y más gente mes a mes, y poniendo en práctica nuevas estrategias para vender.

Eso es lo que nos faltó a nosotras. 

Y bueno, también tengo que mencionar que, con esta estrategia acabé un poco cansada y abrumada. Tener que vender todos los meses no terminó de encajar conmigo. A mí lo que me gusta es aportar mucho valor gratuito, con el podcast, la newsletter, el 80% del tiempo. Y el 20 restante dedicarlo a la venta.

Esto me permite estar alineada con mi misión de DAR, y cuando toca vender, cambiar el chip y también darlo todo.

Un buen equilibrio para mí.

  • En segundo lugar quiero hablarte del contenido dentro de nuestra membresía.

Cuando empezamos el Club, no tenía ni idea de lo que íbamos a ofrecer. Es decir, tenía muchas ideas, pero no sabía qué gustaría y qué sería factible.

Y cometí un error de novata: sobrecargar el Club.

Estaba tan agradecida con las miembros que todo me parecía poco. Y pensé que lo que más les gustaría sería tener algo dentro casi cada día, con la idea de que se apuntasen a lo que más les resonase y les encajase por horario.

Si estabas en el Club hace 2 años y medio aprox. Quizá te acuerdas de esto. Pero para las que no estábais, pintaba de la siguiente forma:

Cada mes teníamos: Un networking, dos mastermind, uno de mañana y uno de tarde, un curso nuevo, un par de masterclasses, y un montón de meetups. Llegamos a tener, si mal no recuerdo, 11 meetups, que eran sesiones que organizaban las miembros sobre su tema de expertise.

De primeras esto tuvo buena acogida, pero poco a poco la asistencia empezó a caer y caer, y las bajas empezaron a aumentar. Y cuando leía el feedback de las personas que se daban de baja, la gran mayoría decían que sentían que no podían aprovecharlo.

Ahí es cuando me di cuenta que MENOS ES MÁS. Y, a través de la prueba y error, fuimos encontrando el punto de equilibrio ideal para nuestro Club.

  • Lo tercero que no me ha funcionado ha sido subir los episodios del podcast a Youtube.

Aquí tengo que aclarar que esto es algo muy personal, y que sé que Youtube funciona genial. Pero la realidad es que yo soy de formato audio. Me siento mucho más cómoda grabando con mis pintas caseras sin tener que estar pendiente de maquillarme, cambiarme de ropa entre entrevistas, que si el fondo bonito, que si la luz…

Estuve una época grabando las entrevistas en vídeo, y realmente no las disfruté porque estaba más pendiente de cómo estar delante de la cámara que de la conversación.

Y además llegaban los días de grabación y me entraba una ansiedad que no es normal en mí. 

Por eso actué rápido y dije, hasta aquí. Yo a lo mío, aunque eso signifique no llegar a tanta gente. 

Es gracioso porque, hablando de esto, me estoy acordando que hace unos años estaba OBSESIONADA con la idea de crear un canal de Youtube hablando de emprendimiento. 

Lo hablaba una y otra vez. Llené cuadernos con ideas. Lo puse en mis objetivos del año. Pero nunca terminaba de dar el paso.

En ese momento pensaba que era el síndrome del impostor, intentando protegerme ante lo desconocido.

Pero no. Ahora sé que hacer algo así no va conmigo, con mi esencia, ni con mi estilo de vida, y por mucho sentido estratégicamente hablando que pueda tener, NO ME COMPENSA.

Aquí una valiosa lección: No todo vale para crecer. Porque si te fuerzas a hacer algo que realmente no te motiva ni te resuena, vas a acabar dejándolo. O peor aún, te va a hacer muy infeliz.

Por eso escucharnos y seguir nuestra intuición es siempre una buena idea.

  • El cuarto lugar quiero hablarte de algo que está relacionado con esto último que te decía, y que me ha llevado de cabeza durante años.

Y empiezo contándote algo personal que nunca había contado por aquí.

Hace un par de veranos empecé a sentir que en Y.E. necesitábamos algo más. El Club llevaba algo más de un año, iba bien la cosa, pero yo quería crecer más rápido y hacer cosas muy guais.

Tenía la idea de sacar una línea de papelería, porque me encantan los cuadernos, planificadores etc. y veía que podría encajar en Y.E.

Esta idea la tenía desde antes del Club, pero no fue hasta que llevábamos un tiempecito con el Club cuando empecé a tomármelo más en serio.

Empecé a hacer un estudio de mercado, a analizar lo que había ahí fuera, los costes, márgenes, procesos… 

Y algo me chirriaba.

Decidí ignorar esa sensación, porque una vez más pensaba que era mi querida impostora. Y seguí informándome y viendo cómo hacerlo posible.

Cuanto más veía, menos ilusión tenía. Pero no entendía por qué. Y eso me frustraba mucho.

Y no fue hasta una conversación sincera con Chris, donde me atreví a profundizar en aquello que estaba sintiendo, donde me di cuenta que esta línea de negocio físico no estaba para nada alineada con el estilo de vida que realmente quiero.

Si llevas un tiempo por aquí sabrás que para mí lo más importante es la libertad. Trabajar desde dónde quiero, cómo quiero, cuándo quiero. 

Y con una línea de papelería, simplemente no veo cómo podría conseguirlo.

Y, con esto de intentar sacar algo que no sientes o no te resuena, quiero contarte otra cosa.

Esos meses en los que el Club dio un bajonazo por los lanzamientos mensuales, yo me sentía bastante desmotivada, y empecé a sentir presión económica.

No nos estaba yendo como yo había proyectado. Y en mi cabeza la solución en ese momento era sacar algo nuevo.

Aquí date cuenta que estaba actuando desde la escasez y desde el miedo. Desde el “tengo que sacar otra cosa para facturar más”, y no desde el “tengo esta idea maravillosa que sé que va a cambiar a la vida a muchas mujeres”.

Y, aunque estaba decidida a hacerlo, no terminaba de comprometerme con nada.

Empecé a crear un par de cursos, pero a los días lo dejaba porque no me gustaba. No me parecía lo suficientemente bueno. Y sobre todo no estaba haciéndolo para vosotras, sino para mí.

Fueron meses de muchos dolores de cabeza, conversaciones eternas, muchos cuadernos escritos.

Hasta que acepté que no puedo crear por crear. Tengo que estar segura de que lo voy a sacar VA A TENER UN IMPACTO ENORME EN TU VIDA, y vas a recuperar con creces esa inversión.

Y en mi caso, ese proceso no se puede forzar. La idea correcta llega en el momento correcto. 

  • Y lo último que hoy quiero contarte es muy de mindset.

Y para dinamizar un poco el episodio, te voy a contar un ejemplo real.

En febrero de 2020 lanzamos el Club. Y unos meses después yo estaba cero motivada.

¿Qué pasó aquí? 

Pues muchas cosas a nivel interno. Cambios, cansancio, expectativas…

Y  una en concreto que es la que te quiero mencionar ahora.

Yo había escuchado a otros emprendedores que seguía que, para crecer, tienes que ponerte objetivos SMART e ir a por ellos.

Y como buena aprendiz, eso es lo que hice. 

En junio hicimos nuestro segundo lanzamiento, y me puse un objetivo numérico, que ahora no me acuerdo. Pero ponte que era llegar a las 124 miembros.

Recuerdo que era como un número random como este, y como soy un poco hiberbis, estuve visualizándolo durante semanas, y de hecho me puse post its en mi dormitorio y donde trabajaba con ese número.

¿Y qué pasó? Pues que no llegamos ahí.

Tampoco nos quedamos lejos. Había como 15 personas menos de mi objetivo. Pero para mí fue como un jarro de agua fría.

Ahora me río porque no tiene sentido. Pero en ese momento emocionalmente estaba tan conectaba con este número, con este resultado, que cualquier otra cosa era fatal.

Recordemos que yo llevaba emprendiendo 5 años antes de Y.E, había tenido varios fracasos, y el Club era el primer proyecto que me funcionaba. 

Y te juro que Y.E y Laura éramos un mismo ente. De hecho, Y.E. abarcada mucho más que mi propia persona.

Pero para esto está la vida, para irnos enseñando y para que vayamos dando forma a la persona que realmente queremos ser.

Yo no quiero ser mi negocio. Ni quiero vivir los éxitos y fracasos de Y.E. a flor de piel.

Por eso, con los años he ido poniendo una distancia sana pero necesaria. Para que las dos podamos crecer y florecer.

Y bueno, hasta aquí el episodio de hoy 🙂 Si te ha gustado, y te apetece, mándame un DM a instagram (@yoemprendedora.es). 

Notas del Episodio:

Laura
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